Cóatl – El misterio de la serpiente

Normalmente no acostumbro hacer sinopsis o criticas de algún libro, no porque no me agrade sino porque considero que esa no es mi labor, sin embargo me pareció interesante realizar una acerca de este:

Cóatl – El misterio de la serpiente

Para los que no lo hayan leído, me permito informarles que este libro se tiene que leer con objetividad, ya que de lo contrario, si por ejemplo eres un devoto judeocristiano encontraras muchas cosas un tanto desagradables (más para los católicos) ya que en el libro “ataca” al sistema monopólico de la iglesia, de igual forma si eres un simpatizante de todo lo opuesto no harás más que reafirmar tu erróneo repudio a la religión y a la iglesia, y si no estás en ningún extremo podrías inclinarte a alguno de estos dos polos,… por eso digo que este libro se tiene que leer con mucha objetividad y no perder de vista que es una novela y por tal motivo (como el autor lo menciona al final del mismo) la historia marca muchos matices y tendencias en contra de la religión judeocristiana por el hecho de que el personaje y la historia en sí, necesitan de eso para llevarse a cabo con éxito (aunque se puede identificar todo como una verdad XD).

Fuera de esta pequeña observación puedo decir que es una muy buena novela, que siempre te tiene queriendo saber que paso después… en momentos se puede tornar un poco lenta pero se libra bien con las historias entrelazadas del pasado y el presente que se van narrando a lo largo de la historia.

A mí en lo personal, independientemente de la novela, me gustaron 3 “trozos” de texto, 2 son pequeños pensamientos o frases que me dejaron muy buena reflexión y el tercero es un “sermón” de lo triste que se está volviendo (o ya se volvió) nuestra sociedad, a continuación cito estas tres cosas:

Frase 1 (pp-217):
<< ¿Para qué sirve el conocimiento sino para compartirlo, difundirlo, multiplicarlo? Aquel que goza y se viste con las joyas del saber y no arriesga su estabilidad para compartirlo, no merece ninguna de las dos >>

Frase 2 (pp-264):
…Un individuo deja de interesarse por el conocimiento cuando aquellos poseedores del saber le dificultaban el camino…<<>>

“Sermón” (pp-328): El padre Gregorio le dice al detective Endoque:
Te encuentras fuera de esa esfera que encierra a la mediocridad, de donde el jodido no quiere salir. No les interesa crecer, aprender ni conocer su historia. << ¿Para qué?, si a fin y al cabo no voy a cambiar nada>>, dicen…No les interesa. Así son, o pretenden, o creen ser felices en su mundo ruidoso y hueco. Pero lloran y se quejan de la pobreza, culpan al rico, y salen todos los días a mendigar, a estirar la mano para que el dinero les caiga del cielo. Los no tan pobres se conforman con un puesto de tamales o la tiendita de la esquina,…, siempre con una revista de espectáculos. No ocupan su tiempo en aprender, en educarse ni en educar a sus hijos. No comprenden que padres ignorantes solo hacen hijos ignorantes. Los de clase media-pobre creen que con enseñarles a obedecer y mandarlos a una escuela pública es suficiente… Muy pocos padres utilizan su tiempo en acompañar a sus hijos en sus estudios académicos hasta la universidad. Creen que basta con pagar la colegiatura… La pobreza es un arma infalible para justificar la falta de educación y formación académica… Culpan al rico y le facturan el problema a dios…Mientras tanto se sientan todas las tardes a ver televisión: telenovelas, esas que inducen a las mujeres a vivir como criadas para encontrar a su príncipe azul; el futbol, que incita a los hombres a gozar, sufrir y enfurecerse con el triunfo y fracaso ajenos aunque ellos sigan en la mediocridad; la música…esa que canta que la vida es bella mientras bailen todos; o melancólica, la que dice que sin un amor la vida es insoportable, esa que enseña que la dependencia es el centro de la vida humana…También desperdician las horas en fiestas superfluas…Pero eso sí, no hay un día en que digan hoy es el día de la cultura, todos a leer por lo menos ese día. << ¡Qué aburrido! >> Luego está la clase media. Esa que cree que se está superando, que porque tiene un poco más de dinero ya se encuentra del otro lado. Que feliz es el mundo mientras no les falte nada en casa… Creen saber demasiado por ser gerentes. Pero también se contaminan con los medios de comunicación… hacen como que ayudan al mundo crenado fundaciones con las que lucran o dan donaciones mientras no les afecte a su bolsillo. Saben un poco de política y literatura y hacen alarde de ello en sus tantas tertulias sociales. Pero no aceptan que también son presas de la sociedad. Peones de los grandes empresarios. Esclavos de un instinto gregario… Luego viene la clase alta, algunos de ellos cultos, otros mediocres, pero a fin de cuentas indiferentes a la pobreza. Comprometidos con la riqueza. Ambiciosos, soberbios y viles. Aunque también hay uno que otro santurrón… también están los verdaderos dueños del mundo, magnates, narcotraficantes, políticos, papas,…Verdaderos sabios del control… fríos, calculadores, indiferentes y, primordialmente, grandes actores. Y sin despreciar a los verdaderos sabios, aquellos ignorados por la sociedad, filósofos, historiadores, conocedores de muchas verdades, y que muy poco pueden hacer por un mundo débil, inconsciente, inmune a las atrocidades de los mercadólogos y comerciantes de la vida mundana. La vida se rige bajo un instinto gregario. Cada nivel a su manera… Confucio dijo que la felicidad consiste en querer lo que tienes y no tener lo que quieres; pero pregúntale a un obispo, a un diputado, a un magnate, y te dirá que la felicidad consiste en tener siempre lo que quieras, y cuando ya lo obtuviste, invéntate otra necesidad para seguirla y ser feliz… Si dejas de aprender dejas de vivir, Por eso muchos dejan de vivir a temprana edad. No piensan. Pensar no consiste en resolver trivialidades, sino analizar por qué están, dónde están y que deben hacer para mejorar…
(Corte algunos trozos para no alargarlo mucho, aunque creo que quedo largo de todas formas =D pero dejo las referencias de las paginas por si alguien quiere leerlo todo, aunque mejor lean el libro completo ya que la historia tiene muchas más cosas que ese sermón)

Para finalizar creo que este libro puede incitar a la reflexión, aunque si no estamos acostumbrados a eso, podemos caer en el error de solo ver lo negativo y no poder ver lo bueno de las cosas (como las dos frases que yo tome y que para muchos se que abra mas). Si eres un buen lector terminaras de leerlo muy rápido y si no, me parece un buen libro para iniciarte en este buen habito del leer y el saber.

La impermanencia

Durante el transcurso de esta vida me he dado cuenta que cada uno de nosotros tiene su concepto de lo que es el "sentido de la vida" y la manera de alcanzarlo y ser feliz "para siempre", cada uno de estos pensamientos es válido, sin embargo muchas veces pasamos por alto una ley universal: la impermanencia de las cosas, nada, absolutamente nada, se mantiene sin cambio o en un mismo estado eternamente, que pasa entonces con las cosas o situaciones? R= solo se transforman,... quizá muchos identifiquen esto con la ley de la conservación de la materia/energía que aprendimos en la secundaria: "la materia/energía no se crea ni se destruye solo se transforma"... desde esta perspectiva podemos ser consientes de que si basamos nuestra felicidad (o la búsqueda de) en "algo" (una cosa, una persona, un bien, un ente, etc.), ese algo puede transformarse y no ser lo que esperamos, pondré 3 ejemplos para dar a entender mejor esto: (1) basamos nuestra felicidad en el hecho de tener un bien (una casa por ejemplo) trabajamos arduamente y al final con todo nuestro esfuerzo obtenemos esa casa por la cual hemos luchado y en efecto cuando la tenemos nos sentimos "completos" y felices, pero un día por algún accidente o fenómeno natural nuestra casa se quema o se derrumba, que creen que pasaría con nosotros si nunca contemplamos esa posibilidad y basábamos nuestra felicidad en ese bien?... el hecho de tener algo o luchar por tener algo que necesitemos no es tan malo, lo que puede traernos sufrimiento es el hecho de nunca pensar que ese algo se puede perder, deshacer, romper, etc., tampoco se trata de pensar negativo, se trata de contemplar y comprender la idea de que basar nuestra felicidad en algo material y superficial puede traernos mucho sufrimiento al perderlo o aferrarnos a eso... (2) también podemos basar nuestra felicidad en una persona (nuestra pareja por ejemplo) y creemos que por el hecho de que esté con nosotros ya estamos "completos" y vamos a ser siempre felices, nunca contemplamos que cada persona es un mundo y que no todos reflexionan las cosas, peor aún muchos ni las hablan y de esa manera cuando hay una discusión o problema nos enojamos, lloramos, lamentamos, decepcionamos y todo porque nunca creímos que nuestra pareja se portaría así con nosotros, también si nuestra pareja no hace las cosas como nosotros queremos damos por hecho que no nos quiere como nosotros a él(la), quisiéramos que fuera solo para nosotros, etc. ... y la cosa no tiene que ir por ahí, en cada uno de nosotros esta la suficiente inteligencia y fuerza para ser feliz uno mismo, cuando decidimos estar para toda la vida con una persona no debiera ser porque creemos que vamos a estar completos y así ser felices, no, debe ser porque queremos compartir con alguien nuestra vida, las cosas buenas y malas, los días felices y los tristes, los chiste y los pleitos y ese amor (entre otras cosas) que tenemos deben permitirnos salir de todas las dificultades juntos y causarnos gran alegría en los momentos de dicha, aclaro en ningún momento buscando que mi pareja va a ser la que me haga feliz, sino mas bien compartir (sin esperar nada a cambio) esa felicidad que yo tengo, con mi pareja y viceversa, porque también todo esto es en vida, pero que pasa cuando uno de los dos ya no este, nos será muy muy difícil salir de esa tristeza cuando basábamos nuestra felicidad en esa persona, sin embargo si solo compartimos nuestra vida con esa persona como arriba mencione será mas fácil salir de esa tristeza que nos deja algún ser querido al partir y podremos estar agradecidos porque tuvimos una vida para compartir con alguien a quien amamos profundamente... (la verdad el punto 2 es muy complejo ya que involucra a mas de una persona y por lo tanto las posibilidades y combinaciones pueden ser increíbles, sin embargo podría resumirlo en: seamos felices con nosotros mismos (sin nada y sin nadie) y después compartamos esto con esa personita especial o con los demás) y por ultimo (3) basamos la felicidad en "algo supremo" (un santo, dios, un amuleto, etc.), psicológicamente la creencia en algo superior es "necesaria" porque así el hombre puede dar respuesta a las cosas que no entiende o no comprende, en el budismo no se niega la existencia de dios (o dioses) sin embargo no creemos que en sus manos este el destino de la humanidad, yo se que este tema causa mucha polémica y podríamos pasar días hablando de esto, solo dejo una pregunta, que espero de verdad reflexiones y no me des la clásica respuesta de "eso es imposible",… has pensado alguna vez, que pasaría si se demostrara (por cualquier medio: científico o espiritual) que Dios no existe (o cualquier ser supremo en el que creas) ahora imagina que basábamos nuestra felicidad en "ese ser supremo", creo que al menos en nuestro país muchas personas entrarían en una depresión enorme, quizá abría muchos suicidios y más violencia, no lo sé, pero ese es un ejemplo de lo frágil que puede ser basar nuestra felicidad en un "ser supremo"... y quien seria yo para decirte en que debes basar tu felicidad, la verdad no soy nadie para decirte que hacer o que pensar (eso y que mucha gente le molesta que le digan cómo ser felices jajaja), solo espero que puedas reflexionar mas acerca de en que basas tu felicidad, así como hacerte consciente de que en este universo todo está en constante cambio, y tanto la felicidad (ordinaria) no puede ser eterna como también el sufrimiento del ser humano no es eterno, todo se transforma... la impermanencia y naturaleza del universo.

-Cita:
La reflexión es el camino hacia la inmortalidad; la falta de reflexión, el camino hacia la muerte.

El comienzo…

A estas fechas se cumplen ya casi tres años de cuando me di cuenta de donde venia mi fascinación por la naturaleza, entender que era esa conexión que me permite sentir la respiración de la naturaleza, comprender el amor de verdad, también de dejar de sentir lastima y comenzar a sentir compasión,... ya mas de tres años de que me di cuenta de quien era ese ser único al que todos pertenecemos, sin distinción de ningún tipo, ese ser que nos hacer ser a cada ser vivo de este universo uno solo y por lo tanto abrir tu mente a esta interconexión, reflexionar en que nada existe por si solo, sino que todas las cosas están relacionadas... la vacuidad... también aprender y comprender la gran ley: “el odio no se combate con el odio sino con amor”... y sin embargo tendrá también poco, mas de un año que me di cuenta que todo esto estaba inmerso en la filosofía budista, claro fue difícil darme cuenta de esto, pues donde crecí nunca había podido leer acerca de esta gran filosofía de la vida. Y desde que comencé a incluir esta filosofía dentro de mi vida, no solo como una lectura mas, sino, como parte de la vida misma, comencé a liberarme de mis mayores temores, comencé a liberarme de temporadas tristes y solitarias... y todo se volvió "color de rosa"... llegue a sentir que no encajaba ya en esta sociedad donde casi todo giraba en torno del dinero, donde la gente si tenia sus momentos espirituales pero eran tan vacíos que solo duraban un día de practica, donde los seres mas cercanos a mi no podían ser felices plenamente y encontrar eso que les hacia falta para poder serlo, así que pensaba muy seriamente en marcharme y ser un "sabio" en alguna montaña, fue entonces cuando penetrando mas en el budismo, conocí a alguien a quien yo llamaría un budista moderno, al maestro Tendzin Gyatso (mejor conocido en nuestro continente como el XIV Dalai Lama) de quien estoy aprendiendo lo maravilloso del budismo, esa manera que tiene de adaptarse y transformarse, de no ser una religión sino una filosofía de la vida y que también te permite psicoanalizar la sociedad, el presente que vivimos y a uno mismo... de esto tiene poco muy poco, tan poco que la hoja de mi diario "La ultima pagina" estaba destinada a eso, a ser la ultima pagina de lo que escribiría, cosa que ha cambiado y que gracias a mucha gente que esta inmersa en todo esto, hoy puedo decir que ese texto es una hoja mas en el diario de mi vida.
Creo pertinente aclarar algo, algo que también leí de este gran maestro: (1) el que mi antigua religión ya no me sea útil, no quiere decir que para la humanidad no lo sea, (2) que debo de honrar y respetar mi antigua religión por todos los valores y personas que creen en ella y (3) que también es mi decisión si quiero cambiarme al budismo o decido solo tomar lo bueno de esta filosofía y llevarlo a mi religión y/o al comportamiento diario en la vida, así que todo lo que yo escriba no es una invitación a que la gente se vuelva al budismo, la diversidad debe de existir, yo en lo personal he decidido adoptar esta filosofía como parte de lo que inculcare a mis seres mas queridos, sin embargo si tú decides no hacerlo, solo toma lo que creas te ayudara a ser mejor persona sin cambiar de religión o estilo de vida, no olvidemos que el mensaje de las principales religiones del mundo es el mismo: amor, compasión y perdón y que no importa quienes seamos buscamos ser felices, en todo eso es donde debemos canalizar nuestras energías y no en discusiones absurdas de quien tiene la razón.

- Reflexión
Un gran maestro recibió cierto día la visita de un erudito profesor en la universidad que venia a adquirir mayor conocimiento.
El gran maestro sirvió el té. Colmó hasta el borde la taza de su huésped, y entonces, en vez de detenerse, siguió vertiendo té sobre ella con toda naturalidad.
El erudito contemplaba absorto la escena, hasta que al fin no pudo contenerse más. "Está ya llena hasta los topes. No siga, por favor".
"Como esta taza" dijo entonces el gran maestro, "estás tú lleno de tus propias opiniones y especulaciones. ¿Cómo podré enseñarte algo a menos que vacíes tu taza?